martes, 21 de abril de 2009

Madama Butterfly y el futuro (la muerte)

En Madama Butterfly de Puccini, la aria en la que Cio-Cio-San le rebela a su criada que su amado Pinkerton regresará, lleva en sí la problemática de lo que esperamos del futuro. Si somos sensibles ante la terrible ilusión que Buterfly alberga al esperar a su "amado", podemos llevarnos un shock sobre lo que esperamos del futuro, puesto que el futuro jamás será como lo queremos. A continuación pongo la letra de esta aria (con todo y video para que nos sublimemos):

Un bel dì, vedremo
Levarsi un fil di fumo
Sull'estremo confin del mare
E poi la nave appare
E poi la nave è bianca.
Entra nel porto, romba il suo saluto.
Vedi? È venuto!
Io non gli scendo incontro, io no.
Mi metto là sul ciglio del colle
E aspetto gran tempo
e non mi pesa a lunga attesa.
E uscito dalla folla cittadina
Un uomo, un picciol punto
S'avvia per la collina.
Chi sarà? Chi sarà?
E come sarà giunto
Che dirà? Che dirà?
Chiamerà Butterfly dalla lontana
Io senza far risposta
Me ne starò nascosta
Un po' per celia,
Un po' per non morire
Al primo incontro,
Ed egli al quanto in pena
Chiamerà, chiamerà :
"Piccina - mogliettina
Olezzo di verbena"
I nomi che mi dava al suo venire.
Tutto questo avverrà,
te lo prometto
Tienti la tua paura -
Io con sicura fede lo aspetto

Traducción al español:

Un bello dia veremos levantarse un hilo de humo en el extremo confín del mar. Y después aparece la nave. Y después la nave es blanca. Entra en el puerto, truena su saludo. ¿Ves? ¡Ha venido! Yo no voy a buscarlo, yo no. Me pongo ahí, en lo alto de la colina y espero, espero mucho tiempo. Y no me importa la larga espera. Y, salido de entre la multitud de la ciudad, un hombre, un pequeño punto, sube por la colina. ¿Quién será?, ¿quién será? Y cuando esté aquí, ¿qué dirá?, ¿qué dirá? Llamará: - Butterfly- desde lo lejos; yo sin responder. Estaré escondida. Un poco por bromear, y un poco por no morir al primer encuentro. Y él, un poco ansioso, llamará, llamará; “Pequeñita, mi pequeña esposa, perfume de verbena”, los nombres que solía llamarme. Todo esto sucederá, te lo prometo. Guárdate tus temores, ¡yo con segura fe lo espero!

De toda la aria, llama la atención estas líneas:

Me ne starò nascosta Estaré escondida
Un po' per celia, Un poco por bromear
Un po' per non morire y un poco por no morir
Al primo incontro al primer encuentro.

En el fondo, Butterfly sabe que el regreso y su futuro (curioso parangón nietzcheano en donde el futuro es el regreso de algo) son imposibles. Al final, Butterfly, se suicida. Es sublime su muerte. porque Puccini al final de la aria nos muestra, en su música, el momento que el presente toca la muerte (el futuro negro) y es lo que da a la opera su climax. La música, en este sentido, es lo que nos pone en contacto con ella (con la muerte y con Madama; la muerte es una mariposa) .

De aquí, habrá de concluir que tener ilusiones en el futuro es pensar la muerte. La ilusión es pensar que hay un final feliz que, sin embargo, es imposible cesar nuestro pensamiento con relación al futuro. En este sentido la esperanza es siempre una ilusión que alimenta nuestra existencia.


Al margen, Wittgenstein anotó algo sobre el futuro:

Cuando pensamos en el futuro del mundo, siempre tenemos la idea de que está en el lugar donde debería estar si siguiera moviéndose tal como vemos moverse ahora. No nos damos cuenta de que no se mueve en línea recta, sino curva, y que su dirección cambia constantemente.

1 comentario:

jf.yedraAaviña dijo...

Me gustó eso de 'tener ilusiones en el futuro es pensar la muerte.' Sin embargo, parece que la muerte, aún cuando estemos vueltos hacia ella, puede convertirse en algo sumamente impropio, aunque, claro, no en el caso de Madama Butterfly. ¿Cómo verías ésta espera en el caso de Lohengrin? (ya que andas rondando terrenos nietzscheanos). ¿Sería el suicidio de Madama Butterfly una afirmación o negación de la voluntad de vivir?

Un saludo, y ¡aguas con las epidemias!